La pista de Roger Bannister
El estadio de Iffley Road es un lugar emblemático cargado de historia donde los atletas han buscado superarse día a día en su pista. En su mayoría estudiantes de la Universidad de Oxford a la que pertenece el recinto. La lluvia y la niebla características de la zona, condado de Oxfordshire, hacen del pequeño emplazamiento un lugar con mística. Ni la climatología adversa ni el paso del tiempo han podido con el lugar en el que Roger Bannister consiguió por primera vez correr una milla en menos de cuatro minutos.
Terrenos arcillosos
En 1867 la prestigiosa Universidad de Oxford eligió unos terrenos en Marston Road para construir una pista de atletismo de 536 metros (0,333 millas) donde los estudiantes pudiesen practicar deporte. El emplazamiento dio bastantes quebraderos de cabeza ya que al ser en su totalidad de césped y estar construido sobre arcilla provocaba constantes inundaciones con las fuertes lluvias, y las condiciones de humedad no mejoraban su estado dejándola inutilizable a los pocos años de estar acabada. Ante la dificultad que suponía renovar la pista en un emplazamiento poco favorable, la universidad decidió arrendar unos terrenos en Iffley Road donde construiría otra nueva. Los trabajos de construcción comenzaron en septiembre de 1876 liderados por el contratista Sr. Hobdell y finalizaron dos días antes de su estreno el 29 de noviembre de 1876 con la primera reunión de atletismo.
Récord de la hora
En 1948 llegó la figura que cambió por completo la historia de Iffley Road. Roger Bannister, estudiante de medicina del Exeter College, fue elegido como presidente del Athletic Club de la Universidad de Oxford. Bannister, que compaginaba sus estudios con el atletismo, se marcó como objetivo principal de su presidencia el reemplazo de la pista construida en 1876 que se encontraba llena de baches y un trazado irregular. Dos años más tarde, en 1950, la pista fue renovada por una nueva de 400 metros (0,25 millas) e inaugurada por John Lowe, rector de la universidad de Oxford.
El mismo año en el que se inauguró la nueva pista de Iffley Road, Roger Bannister participó en el Campeonato de Europa disputado en Bruselas consiguiendo la medalla de bronce en los 800 metros. Dos años después participó en los Juegos Olímpicos de Helsinki rozando la medalla finalizando cuarto en los 1500 metros con tiempo de 3:46. En su presencia en ambas citas tuvo gran importancia la pista de Iffley Road a la que acudía a entrenar siempre que su formación se lo permitía. Fue en este lugar donde consiguió su mayor logro el 6 de mayo de 1954 ante 3.000 espectadores y con la presencia de la BBC, logrando batir el récord de la milla en menos de cuatro minutos. Su tiempo fue de 3:59,4 siendo el primer hombre de la historia en bajar de los cuatro minutos. La pista de Iffley Road entró en la historia al igual que lo hizo su gran valedor.
Una pista preparada para el futuro
Desde 1950 la pista ha sido remodelada en diversas ocasiones introduciendo el material sintético en su trazado en 1976 y volviéndose a pavimentar en 1989. Con el Informe Taylor de 1990, en el que se hicieron una serie de recomendaciones para la seguridad de los estadios tras la tragedia de Hillsborough, la capacidad del estadio tuvo que reducirse a 499 espectadores ya que el precio de mantener un recinto a partir de 500 aficionados era demasiado alto para la Universidad de Oxford.
Con la entrada del nuevo milenio el deterioro de la pista por su constante uso era evidente. En 2005 se iniciaron obras de mejora y en 2007 Sebastian Coe, presidente del Comité Organizador de los JJOO de Londres, acudió para anunciar que la pista pasaría a denominarse como Roger Bannister en honor del hombre que luchó por ella y consiguió su mayor hito en el ámbito deportivo. El propio Bannister organizó una serie de carreras de una milla para los estudiantes de la Universidad de Oxford para conmemorar su proeza, esa que ha quedado reflejada en una placa con el nombre del legendario atleta en la entrada del recinto.
Actualmente la pista se encuentra en gran estado y ha recibido la certificación oficial de la federación de atletismo de Reino Unido, lo que permite la celebración de reuniones de atletismo y que sea elegible para cualquier intento de récord por parte de los atletas.
Fotografía | Getty Images